Al dia siguiente, o dos horas mas tarde, que es lo único que dormí. Me fui a las 7 para el estudio, pasando por el bar de Paco antes de llegar. Mateo era asiduo cliente del bar de Paco. Paco me saludó como siempre, con su cordial sonrisa.
-Hola Diego, buen dia.-me dijo el.
Yo me apoyé con el codo sobre el mostrador, mi cara anunciaba que las noticias no eran buenas. Paco sospecho por mi expresión que algo sucedía.
-Sabe que pasa Paco?-empecé yo, no sabiendo como decirlo.-Falleció Mateo.-
Cuando solté lo que me pareció una bomba, Paco alzó la taza que tenía en la mano y la tiró con pesar y sorpresa sobre la maquina de café.
-Ay, yo me imaginaba.-me dijo Paco, con gran desazon.-Cuando me dijiste asi me imagine que era algo asi, me imagine que era por Mateo.-
Aunque odio ser el cuervo anunciador de las malas noticias, sentía que no podia callarmelo. En la esquina, me encontré con Estela, la vendedora de “la solidaria.” A ella también le di la mala noticia. Fue triste como estaba Sebastián. Pero mas triste fue que ni en ese momento de dolor pudo dejar las diferencias de lado. Si, muy triste, pero más pena daba yo poco meses más tarde. Lo seguí hasta lo de Paco, y aún así no quiso hablarme. La noticia también llegó a todos los que limpian y cuidan el edificio de la galeria. Julio, Marco, Lucas y el resto. Todos vinieron a preguntarnos a Mauricio o a alguno de nosotros sobre la muerte de Mateo. Nos reunimos en el hall del estudio. Mauricio, Toro, Germán, Sebastián, Horacio, Bruno, Brigitte y yo. Luego apareció Miguel con una expresión de pesar tan profunda que me partía mas en dos. Brigitte lloraba desconsolada y quedamente en silencio, le sujeté la mano pero parecía no notar nada a su alrededor. La abracé tratando de consolarla y allí noté alguna reacción. Me partía el alma verla así a Brigitte. Conocía a Mateo hacía mucho, parecía ella la viuda. Cuando ella y Mateo discutían, el resto mirabamos con gracia como parecían un matrimonio, Se peleaban medio en joda y Mateo protestaba en broma:
-Que vieja hincha bolas!!! Por Dios!-
-Pobre Lolo!-acotaba Mauricio, refiriéndose al marido de Brigitte.
Cuando abracé a Brigitte recordando esas situaciones graciosas, me di cuenta que ella era mayor que Mateo. Debía ser un duro golpe para alguien mayor, ver como se va alguien más joven. Como a mi me pegó la muerte de Chango, el amigo de Mariano, a principios de 2004. Ver partir a alguien más joven nos recuerda crudamente que ninguno tiene la vida comprada.En esa mañana de 1 de octubre, la familia RVR se reunia para despedir a uno de sus miembros.
No comments:
Post a Comment